AMISTADES PERDIDAS, vol 1
Anoche soñé con ella. CM y yo éramos buenas amigas. Nos conocimos en el barrio desde que éramos pequeñas pero no nos hicimos amigas hasta llegar al instituto, donde nos metimos al equipo femenino de futbito. Se nos daba fatal pero lo pasábamos genial en el banquillo. Con el tiempo fuimos mejorando y al final nuestro juego defensivo nos llenaba de orgullo.
Todo iba bien hasta que a ella le entró una especie de depresión. Nunca nos comentó lo que le pasaba pero empezó a comportarse de forma muy rara y asocial. El grupillo de chicas seguíamos llamámdola para quedar, por supuesto, a pesar de que había dejado de ser divertido salir con ella. Pero para eso están las amigas.
El declive total llegó en las Navidades del 1999-2000. Esas fueron las peores por muchas cosas. Yo acababa de romper con mi ex en una ruptura de lo más extraña, CM y otra amiga mía, RP, tuvieron una serie de desencuentros, que ambas me contaron, cada una su versión, y mientras yo me deshacía por dentro de dolor por perder a mi chico, con lo que yo le quería....
Dividida entre las dos amigas y con el corazón partío, no tomé la mejor decisión y tomé partido por RP. Mal hecho. Cada una tenía razón. Supongo que yo de aquella necesitaba tranquilidad y no pelea entre amigas. O que yo era simplemente una idiota.
El caso es que dejé de hablar con CM. La mujer no entendía nada. Normal. Me escribió una carta preguntándome qué pasaba y si podíamos hablar. En mi arrogancia pensé que no había nada que aclarar, que todo estaba clarito y ni me molesté en resolver sus dudas. Ahora pienso el daño que mi vacío debió de hacerle.... Y ahora me duele a mí.
Anoche soñé con ella, que nos encontrábamos en Madrid y nos preguntábamos qué tal y hablábamos que daba gusto. Me desperté llorando. La echaba de menos.